domingo, 12 de octubre de 2014










viejo amado

tiendo a corregir enloquecidamente
cada poema que escribo

pero este ni lo voy a mirar

minutos antes de tu partida esta madrugada 
puse en tu oído La Traviata

me salté todos los protocolos de la UCI
y te hice escuchar esa ópera
que tanto te gustaba 

sé que la pudiste oír 

luego/ cuando ya se apagaba tu vida
te dije que por la mañana estaríamos debajo de un árbol
viendo cómo avanzaba la primavera

esa que no alcanzaste a ver

buen viaje padre
ahora descansas por fin

te despojaste de tu calvario

te limpiaste de tanto manoseo

si te puedo pedir un último favor
aparécete en los sueños de Conchita
y dile que estás bien

que estás en un lugar
repleto de colores 

una última cosa:

TE AMO

chao viejo

descansa en paz







PD.- mis más sinceros agradecimientos a todos quienes estuvieron conmigo en estos días aterrados, en estos últimos momentos donde el corazón se hace pedazos y el sol parece una esperanza difícil de lograr...

1 comentario:

Sara O. Durán dijo...

Mi prolongado y sentido abrazo... Mucha fortaleza y luz, para que siempre te sonría desde su nueva vida de paz, que la existencia es eterna.